Piergiorgio Bertoldi nuevo nuncio en RD
El papa Francisco nombró a monseñor Piergiorgio Bertoldi como nuevo nuncio apostólico en la República Dominicana
En un comunicado reciente de la nunciatura apostólica, se ha anunciado que el papa Francisco ha nombrado a monseñor Piergiorgio Bertoldi como el nuevo Nuncio Apostólico para la República Dominicana.
Piergiorgio Bertoldi, oriundo de Milán, Italia, y nacido el 26 de julio de 1963, es actualmente el arzobispo titular de Spello, un pequeño municipio en la provincia italiana de Perugia.
Recepción del nuncio
La decisión del papa Francisco ha sido recibida con gran entusiasmo y beneplácito en la nunciatura apostólica de la República Dominicana. La comunidad eclesiástica dominicana da la bienvenida a monseñor Bertoldi y espera con ansias su liderazgo y orientación en los próximos años.
Perfil de Piergiorgio Bertoldi
Monseñor Piergiorgio Bertoldi es una figura destacada en la Iglesia Católica. Es licenciado en derecho canónico, la rama del derecho que regula la organización de la Iglesia Católica, la disciplina de los sacramentos y lo que se considera ofensa a la fe religiosa.
Carrera diplomática de Bertoldi
Además de su formación eclesiástica, Bertoldi ha tenido una destacada carrera diplomática. Ha servido en diversas partes del mundo, representando al Vaticano en países como Uganda, la República del Congo, Colombia, Rumanía, Irán y Brasil.
Su experiencia y habilidades diplomáticas le han ganado un gran reconocimiento en la Iglesia Católica.
Pasados nombramientos apostólicos
Anteriormente, Bertoldi ha ocupado puestos de alto nivel en la Iglesia Católica, incluyendo el de nuncio apostólico en Burkina Faso y delegado apostólico en Mozambique.
Estos roles le han permitido adquirir una amplia experiencia y un conocimiento profundo de la iglesia y su funcionamiento a nivel global.
Expectativas para el futuro
Con este nuevo nombramiento, se espera que monseñor Piergiorgio Bertoldi aporte su amplia experiencia y conocimiento a la nunciatura apostólica de la República Dominicana.
Su liderazgo y orientación serán fundamentales en los próximos años para fortalecer la presencia y el trabajo de la Iglesia Católica en la República Dominicana.