Abinader honra a la Virgen de La Altagracia en Higüey
Este 21 de enero los católicos veneran a la Virgen de La Altagracia
Higüey, La Altagracia – En un acto que refleja la devoción y el respeto por las tradiciones del pueblo dominicano, el presidente Luis Abinader, acompañado por la primera dama Raquel Arbaje, participó este domingo en la solemne eucaristía en honor a Nuestra Señora de la Altagracia, considerada madre y protectora espiritual de la nación.
La ceremonia religiosa, un evento de gran significado para los dominicanos, se llevó a cabo en la emblemática Basílica Catedral Nuestra Señora de la Altagracia en Higüey. Este lugar, que atrae a miles de fieles cada año, se convirtió en el escenario de una celebración que mezcla la fe, la cultura y la historia de la República Dominicana.
Monseñor Piergiorgio Bertoldi, nuncio apostólico, fue el encargado de oficiar la misa. Durante la ceremonia, se elevó una plegaria especial por la sabiduría y la fortaleza de las autoridades dominicanas, con el fin de guiar al país con equidad y justicia.
El obispo de la Diócesis de Nuestra Señora de La Altagracia, Jesús Castro Marte, se unió a esta conmemoración, reafirmando la importancia de la Virgen de la Altagracia en el corazón de la fe dominicana.
El presidente Abinader llegó a las 10:00 a.m., recibiendo honores militares en compañía de la vicepresidenta Raquel Peña y la gobernadora de la provincia, Martina Pepén. El acto no solo reflejó el respeto institucional a la fe católica, sino también la unión entre la iglesia y el Estado.
Tras la eucaristía, el mandatario visitó el Museo de La Altagracia, Alejandro E. Grullón, continuando con un almuerzo en el Obispado Nuestra Señora de la Altagracia, momentos que destacaron la rica historia y el legado cultural de la región.
La ceremonia contó con la presencia de figuras clave del gobierno, como Joel Santos, ministro de la Presidencia; Víctor -Ito- Bisonó, de Industria, Comercio y MiPymes; Carlos Bonilla, de la Vivienda; el senador Virgilio Cedano; y directores de importantes instituciones del país.
Esta participación del presidente y altos funcionarios en la eucaristía, no solo subraya la importancia de la Virgen de la Altagracia para el pueblo dominicano, sino también reafirma el compromiso del gobierno con la preservación de las tradiciones y valores culturales del país.
