Vladimir Guerrero Jr. confirma ha recibido ofertas de extensión de contrato

Administrator diciembre 23, 2024 11 min de lectura

Punta Cana.-El estelar inicialista de los Azulejos de Toronto, Vladimir Guerrero Jr., confirmó recientemente que ha recibido ofertas de extensión de contrato por parte de su equipo, pero ninguna se acerca a lo que él y su representante buscan.

Durante una conversación informal en el programa Abriendo El Podcast, donde también repasó la firma millonaria de Juan Soto, su amistad con Fernando Tatis Jr. y la posibilidad de participar en el Clásico Mundial de Béisbol 2026—, Guerrero Jr. habló de cómo encara la próxima temporada, de la influencia de su familia en su carrera y de su rutina de entrenamiento en la temporada muerta.

La postura de Guerrero Jr. sobre las negociaciones con Toronto

Tras concluir su participación en 2023, Vladimir Guerrero Jr. reveló que Toronto le ha ofrecido nuevas extensiones de contrato “pero no son ni cercanas” a lo que espera.

En 2021, luego de la temporada en la que peleó el premio al Jugador Más Valioso (MVP), la organización supuestamente le propuso 150 millones de dólares por siete años. Sin embargo, Guerrero Jr. la consideró muy por debajo de su valor en el mercado.

En su más reciente referencia pública, señaló que ha “escuchado algo” sobre propuestas cercanas a los 340 millones de dólares, pero tampoco han llegado a un acuerdo. El dominicano dejó claro que, si no se cumple con la cifra que su entorno y él consideran adecuada antes del inicio de los entrenamientos del próximo año, se centraría plenamente en la temporada y retomaría la idea de la agencia libre una vez finalice su contrato actual en 2025.

“Yo tengo una fecha. Hasta el primer día de entrenamiento puedo negociar. Si no hay acuerdo, me voy a enfocar en jugar pelota”, afirmó Guerrero Jr. con determinación.

El impacto del contrato de Juan Soto y Shohei Ohtani

Uno de los temas obligados en la conversación con el inicialista fue el mega contrato de Juan Soto y los montos históricos que Shohei Ohtani acaba de asegurar en Grandes Ligas.

Guerrero Jr. expresó su admiración y alegría por la firma de Soto y por cómo este tipo de movimientos “abre mercado” para los peloteros que vienen detrás.

Según confesó, el día que vio la confirmación del acuerdo con Soto, no tardó en felicitarlo vía mensaje y en agradecerle de manera indirecta por ayudar a elevar el listón salarial de los toleteros jóvenes.

Asimismo, reconoció que la firma de Ohtani, quien superó la barrera de los 700 millones de dólares combinados en pagos y dinero diferido, lo puso a reflexionar sobre su propia situación. En tono jocoso, pero con un trasfondo serio, confesó que ese contrato terminó de “cambiarle el chip”:

“Primero Ohtani cambió el sistema y luego Soto lo apuntaló. Eso me hace sentir más confiado de que mi valor crecerá”.

Su relación con Fernando Tatis Jr. y el Clásico Mundial de Béisbol

Otro tema de interés fue su amistad con Fernando Tatis Jr. y la posibilidad de que ambos formen parte de la Selección Dominicana en el Clásico Mundial de 2026. Guerrero Jr. aclaró que su sueño siempre ha sido vestir la camiseta de República Dominicana —aun teniendo elegibilidad para Estados Unidos y Canadá—, y que, si está sano, no dudará en integrar el roster.

Recordando el Clásico pasado, en el que tuvo que ausentarse debido a una lesión en la rodilla, indicó que le dolió perderse la oportunidad de defender al país. Sin embargo, agradeció a Nelson Cruz y a los compañeros del equipo dominicano, quienes comprendieron su situación médica. Para 2026, su intención es clara:

“Si no juego con Dominicana, no juego el Clásico. No tengo planes de representar a otro país”.

La influencia familiar y el peso de ser “hijo de Vladimir Guerrero”

Guerrero Jr. narró con orgullo cómo su familia, en especial su madre y su padre —el Salón de la Fama Vladimir Guerrero—, han influido en su carrera. Aunque reconoció que el apellido y la trayectoria de su padre hacen que muchas personas esperen que “sea mejor” que él, el joven toletero puntualiza:

“No quiero ser mejor que mi papá. Quiero ser igual que él. Sus números ya son imborrables. Todo lo que él hizo, ya está logrado. Mi meta es, ojalá, poder igualarlo y tener también una carrera digna de Salón de la Fama”.

La figura de doña Altagracia, su abuela, también salió a relucir. Guerrero Jr. compartió anécdotas sobre el servicio de comida tradicional que ella llevaba a los equipos —local y visitante— cuando viajaba con su nieto. “Ella cocinaba para todos, fuera Toronto o el equipo rival, porque es parte de lo que nos enseñó: dar sin esperar nada a cambio”, dijo emocionado.

Rutinas, entrenamientos y la vida más allá del diamante

A pesar de ser una estrella en Grandes Ligas, Guerrero Jr. reitera que todo se basa en el trabajo disciplinado. Detalló que, en la temporada muerta, se levanta diariamente alrededor de las 5:30 de la mañana para cumplir un intenso programa de entrenamiento en Tampa. Tras dos o tres horas de gimnasio, se desplaza a las jaulas de bateo para perfeccionar su swing. Finaliza alrededor del mediodía y dedica la tarde a su hija y familia.

Sobre su evolución física, recordó el momento en que, tras la pandemia, llegó a los campos de entrenamiento pesando alrededor de 282 libras y lo trasladaron a la primera base “por exceso de peso”. Charl Montoyo, en aquel entonces mánager de Toronto, le dijo sin rodeos que debía adaptarse. Ese suceso lo impulsó a reformar por completo su rutina de alimentación y ejercicios. Hoy, su peso ronda las 243 libras y se plantea mantenerse en ese rango para la próxima temporada, pues considera que le otorga agilidad y firmeza suficientes para batear y fildear.

El arbitraje y su visión sobre el “negocio” del béisbol

Una de las anécdotas más jugosas de Guerrero Jr. fue su paso por el proceso de arbitraje salarial. Explicó que, en la sala, se sientan tres jueces neutrales, el equipo que defiende la postura económica del club y la representación legal del jugador. Tanto el club como el jugador exponen argumentos para fijar un salario —en su caso, la diferencia estaba entre 18.1 millones de dólares que ofrecía Toronto y 19.9 millones que él buscaba—. Finalmente, el dominicano ganó, de manera unánime, la disputa.

“Yo fui, aunque me recomendaron que no fuera. Pero quería saber lo que decían de mí. Es duro porque te dicen en tu cara todo lo malo. Pero hay que entender que esto es un negocio y cada cual defiende sus intereses”, relató.

Tras vivir ese proceso, asegura que se volvió más consciente de la dimensión empresarial de las Grandes Ligas:

“La vida te enseña que puedes confiar solo en tu trabajo y en tu familia. Lo demás es un juego de números e intereses”.

Elogios para Juan Soto, Fernando Tatis Jr. y otros talentos latinos

En la charla, Guerrero Jr. no ahorró elogios al hablar de Juan Soto, a quien describió como “un bateador único” por su capacidad de distinguir lanzamientos malos y buenos incluso estando en medio de un slump. También definió a Fernando Tatis Jr. como “un jugador completo” gracias a su poder ofensivo, defensa, velocidad y soltura en el terreno.

Asimismo, reconoció la disciplina de peloteros como Shohei Ohtani, Ronald Acuña Jr. y el veterano Carlos Santana. De este último valoró su ejemplo de perseverancia para ganar el Guante de Oro en primera base, posición donde Santana se estableció definitivamente. Guerrero Jr. recordó cómo una vez le dijo a Santana:

“No te pongas negativo. Si crees que lo puedes lograr, ponte a trabajar y va a llegar el Guante de Oro”.

El sueño de jugar en la pelota invernal dominicana

Aunque su apretada agenda y exigencias contractuales se lo han impedido en ocasiones, Guerrero Jr. reiteró que desea volver a la Liga Dominicana de Béisbol (LIDOM) en pleno rendimiento. Aspira a “jugar desde el inicio” y, ojalá, representar a un conjunto hasta la Serie del Caribe. Explicó que, en intentos anteriores, hubo malentendidos con el Escogido y también rumores de que terminaría en otro equipo. Sin embargo, enfatizó que sus planes siguen siendo experimentar, al menos una vez más, la pasión de la afición dominicana.

“Antes de retirarme tengo que jugar una Serie del Caribe con la bandera dominicana, sea con el equipo que sea. Ese ambiente hay que vivirlo”.

El factor mental y las adversidades personales

Guerrero Jr. reconoció que 2023 fue un año con altibajos. A mediados de temporada recibió la noticia de que su abuela materna tenía cáncer, lo que lo golpeó emocionalmente. Desde entonces, lució una manga rosada en varios partidos a modo de concienciación y apoyo. Además, contó que, en su momento, prestó demasiada atención a críticas y comentarios de terceros en redes sociales, lo que le generó frustración. Encontró en la Biblia y en el apoyo de su esposa —“una gran compañera que me ha ayudado en los días malos y buenos”— la fuerza para enfocarse en su entrenamiento y no perder de vista sus objetivos.

Manteniendo los pies sobre la tierra

Entre risas, reflexiones y anécdotas, Vladimir Guerrero Jr. dejó claro que valora profundamente la humildad con la que fue criado. Comentó que su padre, a pesar de tener comodidades tras su paso por Grandes Ligas y su ingreso al Salón de la Fama, sigue prefiriendo sus chancletas “viejas” y la cocina típica de la abuela. Él, por su parte, no descarta darse “ciertos gustos” de vez en cuando, pero sin olvidar sus raíces. Esa humildad, sumada a la disciplina, es lo que cree que lo llevará a conseguir un gran contrato y, más importante aún, una carrera llena de logros y satisfacción.

Perspectiva de futuro

Con 25 años, Guerrero Jr. encara los siguientes retos inmediatos:

1. Negociar su extensión o prepararse para la agencia libre en 2025.
2. Seguir puliendo su ofensiva y defensa en primera base, manteniéndose en un peso adecuado.
3. Representar a la República Dominicana en 2026 si las condiciones de salud y contrato lo permiten.
4. Explorar la LIDOM con la visión de disputar una Serie del Caribe.

En sus palabras, “día tras día” es como avanza, sin anticipar mucho más allá de lo que puede controlar. Lo que sí tiene claro es que cualquier acuerdo que firme deberá reflejar el valor de su trabajo y la evolución natural del mercado, que hoy contempla las cifras récord de Soto y Ohtani.

La historia de Vladimir Guerrero Jr. es, ante todo, la de un joven dominicano que lleva con orgullo un apellido legendario en el béisbol. Además de su talento nato, ha demostrado tener la fortaleza para lidiar con el rigor de la temporada de Grandes Ligas, las presiones mediáticas y el peso de las negociaciones millonarias. Mientras se aproxima la primavera de 2024 y, más tarde, la de 2025 —cuando podría convertirse en agente libre—, Guerrero Jr. se prepara con disciplina a las 5:30 de la mañana, decidido a mantener viva la llama que lo llevó a ser uno de los mejores bateadores de su generación.

Para muchos, el próximo gran contrato de Vladimir Guerrero Jr. es solo cuestión de tiempo. Pero, como él mismo lo resumió con sencillez: “Si no se logra un acuerdo a mi gusto, seguiré trabajando y esperaré mi oportunidad en la agencia libre. Uno tiene que enfocarse en lo que puede controlar”.