MPD recuerda asesinato de Amín Abel Hasbún

MPD recuerda asesinato de Amín Abel Hasbún

Amín Abel Hasbún fue asesinado por la Policía durante el Gobierno de Balaguer

Santo Domingo-  En un concurrido acto realizado por el Movimiento Popular Dominicano (MPD), en el Cementerio Nacional de la avenida Máximo Gómez de esta ciudad, fue recordado el líder estudiantil y revolucionario Amín Abel Hasbún, asesinado por la Policía Nacional hace 51 años, durante el llamado Gobierno de los doce años de Balaguer.

El homenaje estuvo encabezado por Fernando Hernández Gómez, vocero nacional del MPD, quien tuvo a su cargo las palabras centrales, en las que resaltó las cualidades que poseía Amín Abel como revolucionario y las virtudes que como ser humano les distinguieron.

“Realmente Amín es uno de los seres humanos que nunca mueren.  Mientras más pasa el tiempo, más se eleva su figura.  Es un ícono, un ejemplo para todos nosotros los revolucionarios y especialmente para la juventud estudiosa del país y de América Latina”, expresó Fernando Hernández.

Indicó que Amín Abel “no sólo fue un hombre de acción, sino también un gran pensador revolucionario”, al recordar que inició la obra “América Latina busca su camino”, en la que explica que los pueblos latinoamericanos andan en constante búsqueda de su camino, con las ganas de reencontrarse con su independencia.

MPD recuerda asesinato de Amín Abel Hasbún

Amín Abel Hasbún

“El encuentro de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), mostró hoy lo que hace más de 50 años planteara Amín, que movimientos de países de Latinoamérica buscan su camino de independencia y de construcción de la Patria Grande, la que soñó Simón Bolívar, planteando entonces, que los revolucionarios debemos ser originales, que no debemos copiar experiencias de otros, sino trillar su camino propio”, sostuvo.

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El portavoz del MPD aseguró que los Estados Unidos no va a permitir ningún “gobierno decente” en la República Dominicana y que boicoteará cualquier asomo de cambio hasta con la violencia, tras señalar que necesariamente tendrá que ser por la vía revolucionaria.

“El imperialismo norteamericano no va a permitir un gobierno decente en la República Dominicana, con una política independiente a nivel internacional, un gobierno que esté en contra del neoliberalismo; que las tierras estén en manos de los campesinos; Estados Unidos no va a permitir una constitución por la vía de una constituyente popular y soberana, sin antes boicotear y declararle la guerra e imponer la violencia, por lo que un cambio real en la República Dominicana tendrá que ser por la vía revolucionaria”, sostuvo Hernández Gómez.

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Felabel

Al acto conmemorativo asistieron Musa Abel Hasbún, hermano del extinto líder revolucionario, y otros familiares, profesores de la UASD, activistas del FALPO, dirigentes y miembros del FELABEL, organización estudiantil que enarbola sus ideales de Amín Abel.  También estuvo presente Ignacio Soto, dirigente sindical y de la Izquierda Revolucionaria.

 Inició su activismo revolucionario en el Movimiento 14 de Junio (1J4), tras la Guerra Patria de Abril del 1965, junto a un grupo de dirigentes denominados “no transformistas”, que se opusieron a que el 1J4 transformara en partido de la clase obrera, porque ya existía el MPD, Amín Abel pasó a las filas de esta organización, en la que alcanzó ser miembro de su Comité Central.

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En su etapa de dirigente estudiantil, fue presidente electo de la Federación de Estudiantes Dominicanos (FED), en tres ocasiones.  Por la persecución de la Policía Nacional y de otros organismos de seguridad del Estado, sufrió encarcelamientos y pasó varios años de su vida de revolucionario en la clandestinidad. 

Tampoco impidió que terminara el pensum de la carrera de Ingeniería Civil con notas de honores, ni que con toda responsabilidad y consecuencia asumiera la política de su partido de “lo mejor al campo”, que lo llevó a Arenoso y otros campos en el Bajo Yuna, en la región Noreste, a organizar a campesinos e impulsar la lucha por la recuperación de tierras, que forzó al gobierno de Balaguer al reparto de predios agrícolas y años después a la Reforma Agracia.