Imponen prisión preventiva madre decapitó a hija

Ana Josefa García Cuello cumplirá la medida de coerción en el CCR Najayo mujeres

Maxwell Reyes

SANTO DOMINGO ESTE, República DominicanaAna Josefa García Cuello, una doctora y miembro del Ejército de la República Dominicana, ha sido enviada a prisión preventiva por un período de 12 meses, tras confesar haber asesinado brutalmente a su hija de seis años en su hogar en Santo Domingo Este.

La medida fue impuesta por el Juzgado de Atención Permanente del distrito judicial de Santo Domingo Este, luego de una audiencia en la que el Ministerio Público presentó evidencias contundentes sobre la gravedad del crimen.

García Cuello cumplirá la medida de coerción en el Centro Penitenciario Najayo Mujeres, mientras las autoridades continúan las investigaciones del caso que ha estremecido al país.

El crimen y la confesión

El pasado 15 de agosto, García Cuello fue arrestada en su residencia en el Residencial Razón 1, sector Issfapol, tras haber sido señalada por vecinos alarmados por la situación.

En un giro sorprendente de los hechos, la doctora confesó abiertamente en un video que circula en los medios de comunicación que decapitó a su hija de seis años, afirmando que «fue Dios quien le dijo que cogiera el cuchillo». Este macabro hecho ha generado consternación nacional y ha puesto el foco en las circunstancias que rodean el caso.

Durante su traslado al Palacio de Justicia de Santo Domingo Este, García Cuello aseguró a la prensa que estaba embarazada y que sufría maltrato a manos del personal de la Dirección General de Prisiones. Sin embargo, estas declaraciones no han sido verificadas por las autoridades hasta el momento.

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Justificación de la medida cautelar

El Ministerio Público, representado por los fiscales Florentino Sánchez Zabala y Wilson Díaz, solicitó la imposición de prisión preventiva alegando que García Cuello no tiene arraigos suficientes para enfrentar el proceso en libertad, y que, dada la naturaleza del crimen, existe un riesgo considerable de fuga. Además, el hecho fue calificado de manera provisional como «homicidio con premeditación y asechanza», lo cual está contemplado en los artículos 295, 296, 297 y 304 del Código Penal Dominicano.

El juez Leomar Cruz Quezada, quien presidió la audiencia, coincidió con los fiscales al dictar la medida de coerción. En su fallo, enfatizó la necesidad de garantizar la seguridad pública y la integridad del proceso judicial, por lo que decidió que la doctora García Cuello debía permanecer bajo custodia.

El impacto en la comunidad

Este caso ha causado un profundo impacto en la sociedad dominicana, especialmente en la comunidad de Santo Domingo Este. La brutalidad del crimen ha dejado a los residentes del sector Isfapol en estado de shock. Según vecinos, nunca imaginaron que algo tan atroz pudiera suceder en su entorno cercano, describiendo a García Cuello como una mujer tranquila y reservada. Sin embargo, algunos comentaron que en los últimos meses había mostrado signos de estrés y agotamiento, aunque nadie sospechaba que estos signos pudieran desembocar en una tragedia de esta magnitud.

La comunidad educativa también se ha visto afectada, ya que la menor, conocida por sus iniciales E. F. G., asistía a una escuela local donde era descrita como una niña alegre y curiosa. Sus compañeros de clase y maestros se han unido en actos de solidaridad, expresando su dolor por la pérdida.

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Reacciones y declaraciones

Las declaraciones de García Cuello han causado una fuerte controversia, ya que en su confesión mencionó que una «voz divina» le ordenó cometer el crimen. Este tipo de afirmaciones ha levantado interrogantes sobre su estado mental y si podría estar enfrentando problemas psicológicos. Sin embargo, hasta el momento, las autoridades no han dado a conocer si han realizado evaluaciones psiquiátricas para determinar el estado mental de la imputada.

El abogado de la acusada, Jorge Luis Martínez, ha pedido que se realicen exámenes médicos y psicológicos a su cliente para esclarecer si estaba en pleno uso de sus facultades al momento de cometer el crimen. Además, ha indicado que existe la posibilidad de que su defendida sufra de alguna condición mental no diagnosticada. Martínez también expresó su preocupación por las condiciones en las que García Cuello ha estado detenida, citando los presuntos maltratos denunciados por su cliente.

Por otro lado, organizaciones defensoras de los derechos de la mujer y de la niñez han condenado el crimen, exigiendo justicia para la menor y llamando la atención sobre la importancia de la salud mental en el país. La Coordinadora de Mujeres del Este emitió un comunicado en el que lamentaba profundamente lo sucedido y hacía un llamado a las autoridades para que investiguen si existieron señales previas de alerta que pudieron haberse detectado y prevenido.

El proceso judicial en curso

A pesar de la confesión, el Ministerio Público continúa investigando el caso para reunir todas las pruebas necesarias que puedan fortalecer la acusación contra García Cuello. Se están realizando entrevistas con familiares, vecinos, y allegados de la doctora para obtener una mejor comprensión del contexto en el que ocurrió el crimen. La fiscalía también ha asegurado que se realizará una revisión exhaustiva de la escena del crimen y se analizarán los antecedentes médicos y psicológicos de García Cuello.

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Las autoridades han solicitado la cooperación de expertos en salud mental para evaluar la estabilidad psicológica de la imputada y determinar si será necesario incluir este aspecto como parte de la defensa. Sin embargo, los fiscales han sido enfáticos en que las pruebas hasta ahora recopiladas apuntan claramente a un crimen premeditado.

Mientras tanto, los medios de comunicación nacionales e internacionales han seguido de cerca el caso, reflejando el interés general en esta trágica historia que ha tocado las fibras más sensibles de la sociedad dominicana.

Perspectivas futuras

El juicio contra Ana Josefa García Cuello se vislumbra como uno de los más seguidos en los últimos años, dada la naturaleza del crimen y la relevancia de los actores involucrados. La justicia dominicana tiene por delante el reto de procesar un caso que ha generado tanto repudio y preocupación en la ciudadanía.

En los próximos meses, se espera que las audiencias preliminares y la fase de investigación sigan aportando más detalles sobre lo sucedido y las posibles motivaciones detrás de este terrible hecho. Mientras tanto, la comunidad de Santo Domingo Este sigue conmocionada, buscando respuestas en medio de una tragedia que ha dejado una marca imborrable en el país.

Con la medida de coerción ya impuesta, el siguiente paso será la preparación del juicio donde el Ministerio Público buscará una condena ejemplar, y la defensa de García Cuello intentará, posiblemente, argumentar la condición mental de su cliente como un factor clave en el caso.

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