Distribución de 2.7 millones de guineos maduros en escuelas
Los guineos maduros serán distribuidos en 22 escuelas
Como parte de un proyecto piloto desarrollado por el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (INABIE) en colaboración con el Ministerio de Agricultura, 2.7 millones de guineos maduros serán distribuidos en 22 planteles educativos.
El objetivo principal es incluir frutas en la alimentación escolar y fomentar hábitos saludables en los estudiantes.
10,037 estudiantes beneficiados en Santo Domingo y el 14 de mayo
Los primeros beneficiados de este proyecto serán 10,037 estudiantes en ocho centros educativos de Santo Domingo y 14 de mayo.
La implementación del piloto comenzó la semana pasada después de varios meses de trabajo conjunto entre INABIE y el Ministerio de Agricultura.
Durante este tiempo, se realizaron adecuaciones en las cocinas de los planteles para cumplir con los lineamientos de manipulación de alimentos y garantizar la calidad e inocuidad de los productos.
Retiro de néctares azucarados y la incorporación de una variedad de frutas
Con la puesta en marcha del piloto, los néctares con alto contenido de azúcares serán retirados de la jornada escolar extendida.
En su lugar, se incluirán diversas frutas como guineo, lechosa, sandía, melón, pitahaya y fresas, dependiendo de la producción local y la temporada de cada fruta.
La inclusión de frutas en el programa de alimentación escolar es posible gracias a las alianzas entre INABIE, el Ministerio de Agricultura y productores locales, especialmente grupos de mujeres en el campo.
Consumo de frutas para combatir el sobrepeso y la obesidad en la población estudiantil
El proyecto surge a raíz de un estudio reciente realizado por INABIE, el cual revela que el 31.2% de la población estudiantil presenta sobrepeso y obesidad, mientras que solo un 18% consume frutas diariamente.
La distribución de frutas en las escuelas busca aumentar el consumo de alimentos naturales y nutritivos entre los estudiantes, contribuyendo así a reducir los índices de sobrepeso y obesidad.
Este proyecto piloto es solo el comienzo de una serie de esfuerzos que buscan mejorar la alimentación escolar en todo el país.
Con la colaboración de diferentes sectores y el compromiso de los estudiantes y sus familias, es posible generar un cambio significativo en la salud y el bienestar de los niños y jóvenes dominicanos.
