Atropello y tiroteo en Nueva Orleans: 10 muertos, 30 heridos

Administrator enero 1, 2025 6 min de lectura

La policía de Nueva Orleans confirmó el número de víctimas mortales

Nueva Orleans.-Al menos 10 personas murieron y otras 30 resultaron heridas la madrugada de este 1 de enero en el centro de Nueva Orleans, Estados Unidos, cuando un camión embistió a una multitud que celebraba la llegada del año nuevo y su conductor posteriormente abrió fuego.

La policía respondió con disparos, lo que generó pánico y caos en la zona del Barrio Francés.

El incidente ocurrió alrededor de las 3:15 o 3:30 de la madrugada, hora local, en la famosa Bourbon Street, ubicada en el reconocido Barrio Francés de Nueva Orleans.

Según testigos presenciales, el camión avanzó a gran velocidad contra decenas de personas que se encontraban en la calle festejando el inicio del nuevo año.

Tras el impacto, el conductor bajó del vehículo y comenzó a disparar indiscriminadamente contra quienes intentaban ponerse a salvo o socorrer a los heridos

Las autoridades policiales, que patrullaban la zona para controlar la multitud de las celebraciones, respondieron con fuego al agresor. Testigos describen la escena como “caótica”, con personas huyendo en todas direcciones y buscando refugio en bares y comercios cercanos que mantenían sus puertas abiertas hasta altas horas de la madrugada.

La policía de Nueva Orleans confirmó el número de víctimas mortales y heridos preliminares a través de un comunicado oficial. Sin embargo, advirtió que el balance podría variar conforme avancen las investigaciones y se actualice el estado de los lesionados, muchos de ellos con heridas de bala o contusiones graves provocadas por el atropello.

Las primeras pesquisas señalan que el camión involucrado podría haber sido reportado como robado días antes, aunque esta información aún no ha sido verificada de manera definitiva.

Fuentes locales indicaron que el conductor, cuya identidad no se ha dado a conocer, fue reducido en el lugar y trasladado a un centro de detención para ser interrogado. Los investigadores buscan determinar si actuó en solitario o con cómplices, así como el móvil detrás de la tragedia.

El Departamento de Policía de Nueva Orleans (NOPD, por sus siglas en inglés) solicitó la colaboración de cualquier persona que cuente con videos o fotografías del momento del incidente, con el fin de complementar la investigación. De igual forma, ha pedido que los testigos se presenten para aportar sus declaraciones y ayudar a reconstruir con mayor precisión los hechos.

Los servicios de emergencia se desplegaron rápidamente en Bourbon Street, una zona popular por su vida nocturna, bares y restaurantes. Ambulancias y bomberos se trasladaron de inmediato para atender a los heridos y trasladarlos a hospitales cercanos. De acuerdo con las autoridades sanitarias, varios de los lesionados se encontraban en estado crítico al momento de su ingreso, por lo que se teme que el número de víctimas mortales pueda aumentar en las próximas horas.

Por su parte, la alcaldesa de Nueva Orleans, así como el gobernador del estado de Luisiana, han expresado su consternación y enviaron sus condolencias a las familias de los afectados. En un comunicado conjunto, prometieron trabajar estrechamente con la policía local y las agencias federales para esclarecer lo ocurrido y reforzar la seguridad en la ciudad durante las festividades.

Varios transeúntes que presenciaron el atropello múltiple y el posterior tiroteo relataron momentos de “terror absoluto”. Una turista que se encontraba en la zona para disfrutar la celebración de Año Nuevo afirmó que “todo pasó muy rápido: vimos el camión a toda velocidad y, cuando nos dimos cuenta, la gente estaba en el piso. Luego empezaron los disparos. Fue una locura”.

Otros testigos destacaron la rápida respuesta de la policía, que ya se hallaba en la zona dada la gran afluencia de personas. Según sus relatos, los agentes actuaron casi de inmediato al oír los disparos, intentando controlar al agresor y evitar daños mayores. No obstante, la confusión reinante dificultó el trabajo de las fuerzas de seguridad y de los equipos de rescate.

Nueva Orleans es conocida internacionalmente por su música, su gastronomía y su ambiente festivo, especialmente en el Barrio Francés, que atrae a turistas de todo el mundo. Celebraciones como la de Año Nuevo y el Mardi Gras congregan a miles de personas en las calles, lo que puede plantear retos de seguridad para las autoridades locales.

A lo largo de los años, diversas ciudades de Estados Unidos han enfrentado incidentes violentos durante reuniones multitudinarias, ya sea por atentados, atropellos o ataques con armas de fuego. El país ha vivido un debate continuo en torno a la regulación de las armas y la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en eventos masivos. Sin embargo, la pluralidad de legislaciones estatales y las divisiones políticas han complicado la implementación de una política unificada al respecto.

En el caso de Nueva Orleans, las autoridades suelen reforzar la presencia policial en el Barrio Francés, sobre todo en las principales fechas turísticas. No obstante, sucesos como el ocurrido esta madrugada evidencian la dificultad de impedir actos violentos aislados, incluso con un dispositivo de seguridad aumentado.

La comunidad de Nueva Orleans ha reaccionado con incredulidad y dolor ante esta tragedia, ya que la ciudad se caracteriza por su vibrante vida cultural y su tradición de hospitalidad. Diversos líderes comunitarios han convocado a la población a la solidaridad con las víctimas y a colaborar con la investigación oficial.

Se prevé que la ciudad implemente operativos especiales en los próximos días para atender a los turistas que aún permanecen en la zona tras las festividades de Año Nuevo. Algunas organizaciones civiles exigen un debate más amplio sobre la posesión de armas, el control de vehículos pesados y la necesidad de fortalecer la vigilancia en eventos de gran escala.

Mientras tanto, las autoridades señalaron que priorizarán la atención médica a los heridos y brindarán apoyo psicológico a los sobrevivientes y sus familias. Psicólogos y trabajadores sociales han sido movilizados hacia los hospitales para asistir a quienes presenciaron o resultaron afectados por el atropello y posterior tiroteo.

La tragedia vivida en Nueva Orleans el primer día del año evidencia una vez más la vulnerabilidad de los espacios públicos ante ataques violentos. A pesar de la rápida respuesta de las fuerzas de seguridad, el saldo preliminar de 10 muertos y 30 heridos pone de relieve la urgencia de revisar protocolos de seguridad y las políticas de control de armas en zonas turísticas y eventos multitudinarios.

Las próximas horas serán cruciales para esclarecer los motivos del agresor y determinar si actuó de manera premeditada o bajo la influencia de sustancias. Entretanto, las autoridades continúan solicitando la colaboración de la ciudadanía y brindando apoyo a los afectados.