Arzobispo advierte: ¡Respeten la dignidad en deportaciones!

Maxwell Reyes enero 27, 2025 3 min de lectura

sANTIAGO.-El arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago, monseñor Héctor Rafael Rodríguez, pidió que se respete la dignidad humana en las deportaciones durante su más reciente discurso público en Santiago.

La autoridad eclesiástica enfatizó que, aunque sea necesario hacer cumplir la ley, cada persona debe ser tratada con humanidad para evitar que los retornos se realicen “como si fueran ganado”.

En su intervención, monseñor Rodríguez recordó que “cualquier ser humano, incluso quien haya cometido un delito, tiene dignidad” y no puede ser despojado de ella bajo ninguna circunstancia. Para el prelado, el problema no radica únicamente en deportar a quienes no cumplan con las normas migratorias, sino en cómo se lleva a cabo el proceso de repatriación.

El arzobispo se refirió al caso de la República Dominicana, aludiendo a la llegada de personas deportadas desde diferentes países, principalmente Estados Unidos y Puerto Rico. Subrayó la urgencia de prepararse ante un incremento en el número de deportaciones, haciendo hincapié en “no tratarlos como vacas o bueyes”, sino en proveer un proceso digno y ordenado.

Asimismo, instó a que ese mismo estándar de trato humanitario se aplique si, en el futuro, otros países deciden enviar de regreso a un número mayor de dominicanos. Monseñor Rodríguez señaló que a menudo se difunden rumores —incluyendo supuestos pagos o recompensas— que pueden ser “fake news”, lo que genera mayor incertidumbre en la opinión pública y en la población afectada por las deportaciones.

El tema de las deportaciones es de amplio debate en la República Dominicana y otros países de la región, pues involucra aspectos legales, humanitarios, económicos y de derechos humanos. De acuerdo con organizaciones de la sociedad civil, el cumplimiento de las leyes migratorias es un derecho soberano de cada nación; sin embargo, suele reclamarse la implementación de protocolos más humanitarios, especialmente para personas en situación de vulnerabilidad, como familias, mujeres embarazadas o individuos con enfermedades crónicas.

En los últimos años, el flujo migratorio hacia y desde la República Dominicana ha experimentado diferentes matices:

• Deportaciones desde Estados Unidos y Puerto Rico: miles de dominicanos y otros migrantes que residen sin documentos legales han sido retornados anualmente.
• Migración haitiana hacia la República Dominicana: el país ha gestionado distintas políticas para regular y, en ocasiones, repatriar a inmigrantes haitianos en situación irregular.
• Debate político y social: las opiniones oscilan entre posturas que exigen un mayor control en las fronteras y quienes defienden la necesidad de programas de integración que respeten los derechos humanos.

La Iglesia Católica, históricamente, ha desempeñado un papel activo en la protección de la dignidad de los migrantes. Voces como la de monseñor Héctor Rafael Rodríguez se suman a la de otros líderes eclesiásticos que abogan por el respeto a la condición humana como eje central de cualquier política migratoria.